La esencia de mandarina es la gran aliada del sistema nervioso. También se la considera la esencia de los niños, será útil para todos aquellos niños muy nerviosos y agitados que duermen mal. Su aroma satisface tanto a los peques de la casa como a los adultos.
Como aromaterapia, los perfumistas aseguran que esta esencia cítrica favorece ambientes distendidos y amables.